Así puedes evitar ser ‘hackeado’ al conectarte a una red wifi pública


No siempre es posible dejar de usar las redes gratuitas cuando estamos de viaje, pero es posible lograr que la experiencia sea segura


Por mucho que por nuestra seguridad los expertos nos recomiendan no conectarnos a las redes wifi abiertas que no conocemos, no siempre es posible dejar de usarlas. Sobre todo cuando vamos de viaje. Principalmente cuando viajamos fuera de Europa y el precio de las conexiones 4G o 3G es muy alto o cuando nuestro plan de datos comienza a flaquear por el uso intensivo que hacemos del smartphone.
En este artículo del diario New York Times se explica que las redes 4G aunque son seguras no son imposibles de interceptar (en las comunicaciones inalámbricas en realidad nada lo es). Aunque ciertamente son más seguras que una red wifi pública. Pero aquí también se hace un matiz importante.
Es posible reforzar la seguridad de los datos que transmitimos mediante redes wifi abiertas. La mala noticia es que no es gratis en muchas ocasiones. Existen servicios en forma de aplicaciones que permiten reforzar la seguridad de las comunicaciones que realizamos a través de estas redes encriptando los datos que compartimos con ellas.
Estas soluciones se basan en crear redes privadas virtuales. En este medio estadounidense recomiendan F-Secure, cuyo precio decrece en función del tiempo contratado y de los dispositivos que se conecten, y Private Internet Access.
No son los únicos servicios de este tipo. Avast ofrece para varios dispositivos la opción de crear una red VPN privada por 20 euros anuales. Un precio competitivo. Una opción gratuita, aunque existen un plan de pago, es la de Hola! VPN, que además nos permite acceder sin restricciones a cualquier página. Algo que puede ser útil cuando estamos viajando y nos topamos con restricciones de contenido en un país concreto.
Este servicio se encuentra disponible para dispositivos móviles iOS y Android, pero también para ordenadores. En el caso de usarlo en un PC o en Mac debemos usar Chrome o Firefox con una extensión concreta que descargamos gratuitamente.


Por otra parte algunos operadores de telecomunicaciones ofrecen servicios de seguridad. Como es el caso de Vodafone Secure Net, este servicio no crea una red VPN, pero si permite por un euro al mes disfrutar de algunas opciones interesantes: Antivirus; una protección web que permite recibir un aviso antes de acceder a web peligrosas; una función que muestra informes personalizados en tiempo real de las amenazas, tanto de web bloqueadas como de archivos peligrosos y algunas otras cosas.
En cualquier caso no todas las redes wifi son igualmente preocupantes. Es conveniente leer la letra pequeña si no es posible con los términos y condiciones de la red a la que vamos a acceder. Por otra parte, si accedemos a páginas https tendremos garantizado un mayor nivel de protección de nuestros datos. En cualquier caso, siempre que sea posible es mejor optar por navegar con un plan de datos 4G o 3G. Por lo que no es descabellado que llegado el caso optemos por comprar una tarjeta SIM con datos suplementarios que complemente o sustituya a la que usamos normalmente.

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