De Versace hasta Calzedonia y
Asos
El reinado de las medias
negras, tupidas y aburridas, ha sido derrocado. Esta temporada los estampados
divertidos, abalorios brillantes e incluso logos se tejen tanto en medias
largas como cortas. Lo corroboran firmas especializadas en esta prenda,
como Calzedonia pero también las marcas low cost y la
industria del lujo.
Es complicado señalar el punto
exacto en el que las medias de colores se volvieron a colar en la moda actual.
Protagonistas en formato legging del armario de Jane Fonda, para su mítico
programa de gimnasia en VHS, se popularizaron como ropa de calle en la década
de los 70, gracias a las influencers de la época como Twiggy.
La música disco alargó su
vigencia en la moda una década más, pero llegados los años 90 la industria se
apagó de nuevo para tomarse un merecido descanso de la explosión de color que
imperaba. Con el despunte del estilo grunge y el punk se volvió a
vestir con colores neutros, básicos como el negro, el blanco o el marrón.
Ahora, tras años apareciendo
tímidamente aquí i allá, en una colección concreta, en el armario de una
celebridad excéntrica, las medias de colores vuelven para
quedarse. Happy Socks nos recordó que los calcetines divertidos
también pueden tener su valor a la hora de montar un estilismo y Calzedonia
renovó su producto estrella hace unos años integrando formas, colores y hasta
abalorios en sus medias.
En cuanto a la industria del
lujo, marcas como Moschino o Versace han optado por
recuperar esta moda y convertirla en tendencia, de nuevo. Tras su paso por las
pasarelas la cadena de montaje de la industria ha empezado a girar y ha
transportado esta tendencia a las firmas medianas
como Asos y Kling, para después terminar invadiendo también la
moda low cost.
Además de los estampados y el
colorido, Fendi y Saks Potts han apostado por ir un paso más allá e integrar
el hype por la logomanía en esta prenda.
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