Asimetrías,
deconstrucciones y un binomio blanco y negro
El recinto
modernista de Sant Pau ha acogido una auténtica reunión de
brujas durante el desfile de Txell Miras. La presentación de su
colección para el próximo invierno de 2019 se ha iniciado con la aparición en
escena de las modelo simulando un aquelarre.
La inspiración
de la colección y su temática se ha centrado en reproducir el ocultismo que
existía detrás de la caza de brujas. A través de prendasasimétricas,
la superposición de capas y un sinfín de deconstrucciones, las prendas
emulaban caos. Además, para representar la persecución y la propia caza,
algunas prendas llevaban mangas extra largas y con hilos que imitaban camisas
de fuerza.
Otro recurso que
la diseñadora ha usado para representar la temática de la colección ha sido el
color. Este respondía a la simbología del ocultismo, con tonalidades blancas y negras. Además, para romper con el
binomio, también se han incluido otros colores como el azul o el verde militar en prendas monocromáticas.
Los conjuntos
con más fuerza han sido prendas con deconstrucciones infinitas en la parte
superior y combinadas con pantalones de punto con un
estilo deportivo. También ha tenido su protagonismo los cuellos altos de lana que contrastaban con las
prendas satinadas de muchos de los estilismos.
Los accesorios
han tenido una especial relevancia en la transmisión del mensaje de la
diseñadora y su colección, y que concordaba con la temática de la misma, a
través de guantes asimétricos o colgantes en forma de cruz que
reforzaban el aire religioso. Para el pelo, las modelos han desfilado con el
popular ‘efecto mojado’, uno de los peinados más populares esta
temporada.
Txell Miras, una
veterana en la semana de la moda de la ciudad condal, ha apuntado que, para el próximo invierno, los básicos que no fallaránserán
jerséis de cuello alto, pantalones tobilleros de estilo atlético,
chaquetas oversize con deconstrucciones y combinados con
estilismos monocromáticos.
Comentarios
Publicar un comentario