La firma ha lanzado su primera
línea de ropa interior masculina
Tom Ford tiene una
concepción del traje masculino que es de todo menos tradicional y así lo ha
demostrado, una vez más, durante la semana de la moda masculina de Nueva York.
Según el diseñador, para la próxima temporada de invierno de 2018, l os
hombres arriesgarán con tejidos brillantes, metalizados y estampados combinados
en tonalidades oscuras y colores pasteles como el amarillo o el rosa.
El desfile marcó la diferencia
entre los estilismos de día y de noche que conforman la colección. Primero se
presentaron los looks de diario, que combinan chaquetas con
jerséis de cuello alto, pantalones y capas para dar paso, en un segundo
plano, a los clásicos blazers que tanto representan al diseñador,
repletos de estampados y texturas extravagantes.
Incluso se pudo ver una
tercera parte de la colección destinada a la ropa interior. Para cerrar el
desfile, los últimos modelos presentaron la primera línea de boxers de la
marca. Las prendas estaban formadas por una tira en color negro y con el nombre
del diseñador, combinados con distintas tonalidades de marrón y estampados
de animal print u otros con tejidos satinados.
Los jerséis de cuello
alto predominaron, combinados con chaquetas de piel o acolchadas. En
lineas generales, una gran mayoría de prendas denotaban una cierta inspiración
a los looks de esquiar, con multitud de capas y gafas de sol
extra grandes. Además, el diseñador también incluyó mocasines, prendas de
estilo deportivo y el clásico blazer de la firma combinado con
estilismos formales u otros más informales.
El estampado
estrella de la firma para la próxima temporada es el de piel de
serpiente, que se pudo ver tanto en pantalones como en chaquetas y zapatos. La
firma desarrolló una colección repleta de tejidos metalizados, chaquetas de
terciopelo. La paleta de colores se movía entre tonalidades muy neutras
con otras contrastando el negro con vivos colores.
La firma es uno de los
referentes en moda masculina y también una de las que más arriesga en la
confección y diseño de los trajes. Alejada de una línea clásica y sobria, Ford
apuesta por la combinación de estampados y prendas que no tienen una
aparente relación entre sí pero que juntas, crean un estilo de vestir moderno.
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