La diseñadora
libanesa convierte en un bosque encantado el Museu Marítim de Barcelona para
presentar su colección primavera/verano 2019
El Museu Marítim de
Barcelona se ha convertido este miércoles noche en un cuento shakesperiano
escrito e ilustrado por la reputada diseñadora libanesa Reem Acra. La
invitada especial de la Bridal Fashion Week, edición que se encuentra en
su ecuador, cautivó a los más de 300 invitados con su colección
primavera/verano 2019.
La magia de oriente medio,
su tierra natal, ha estado presente en cada una de sus piezas. También, su amor
por la costura tradicional, la cual aprendió de su abuela cuando era tan solo
una niña, y sus influencias en la moda europea y americana, donde adquirió su
formación como diseñadora. Toda la historia de Reem Acra está bordada
en esta colección de ensueño, diseñada según su creadora para la mujer actual,
empoderada, moderna y tradicional a partes iguales.
“Para esta colección las
modelos han de andar como princesas modernas, han de andar como reinas. Cuando
desfilan les digo que no tienen que exponer mis vestidos sino andar como si se
casaran, como si dominaran el mundo”, ha asegurado la diseñadora horas antes
del desfile.
Las nuevas prendas de Reem
Acra son refinadas y sensoriales. Están repletas de bordados, pequeñas cuentas
brillantes, transparencias y tuls de princesa. Acra ha demostrado ser
una maestra nata en la sobreexposición de telas y texturas diferentes, que
aportan al vestido ese aire mágico, la delicadez de una princesa o incluso de
una ninfa.
Esta colección es la primera
que la modista libanesa presenta en Europa. “Tiene un lenguaje propio y le
tengo un profundo aprecio”, ha explicado Acra preguntada por la importancia de
esta desfile en su carrera.
La diseñadora fetiche de
estrellas como Angelina Jolie, Beyonce o Allison
Janney - lució uno de sus vestidos para recoger el Oscar a mejor actriz
secundaria por Yo, Tonya- defiende por encima de todo la elegancia y la
sensualidad femenina, muy presente en esta colección. “Yo no hago ropa sexy”,
sostiene.
Acra ha combinado todos los
vestidos con accesorios de cuento que potenciaban todavía más esa atmósfera de
fantasía. Las modelos han lucido muñequeras con pequeños pájaros blancos
artificiales y ramos campestres de grandes dimensiones.
Sin embargo, el detalle más
poderoso lo lucían tras las tiaras florales extra grandes, donde se escondía en
cada una de ellas una corona de plata o de oro. Tal vez, lo que pretendía Acra
era recordarles en secreto que esta noche eran reinas de cuento, caminando
hacia el altar.
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