Si algo nunca hace falta en Milán, es un gran derroche de energía. Italia se encuentra inmersa en una inesperada crisis política después de que el presidente octogenario Sergio Mattarella anunció en Roma que no renovará su mandato de seis años, que terminará en dos semanas. No obstante, al norte de la península, Milán, la capital italiana de la moda, brilló durante 4 días con su Fashion Week masculina.
“Fue un momento para
recordarles a todos que tenemos una importante industria de la moda en Italia.
El sector emplea a alrededor de 1,2 millones de personas, y era importante para
nuestras marcas y nuestras casas mostrar al mundo lo que han estado creando”,
insistió Carlo Capasa, presidente de Camera della Moda, el organismo rector de la
moda italiana.
Los espectáculos tenían un
aforo limitado y los compradores asiáticos y rusos, en general, estuvieron
ausentes, pero hubo muchas ideas nuevas de diseñadores jóvenes y marcas
históricas renovadas. Para ingresar a cualquier espectáculo, presentación o
evento, todos los invitados debían mostrar un comprobante de vacunación, lo que
los italianos llaman un Green Pass, y someterse a control de la temperatura
corporal con frecuencia.
“Era fundamental que la moda
demostrara que respeta la preocupación de la población en general por la
pandemia. Que respetamos escrupulosamente las reglas y no esperamos
privilegios, a diferencia de ciertas estrellas de otras industrias”, insistió
Capasa.
En las últimas 24 horas del
programa, acudimos a las presentaciones de cuatro marcas para tomar la
temperatura de la industria de la moda.
JW Anderson
La nueva colección de JW
Anderson, que fue presentada en un vídeo de exhibición filmado dentro de un
club nocturno de paredes rojas, ofreció una leve flexión de las normas de
género y una ingeniosa iconoclastia.
Desde camisas tipo vestido de
demin hasta dramáticos vestidos de abrigo de piel de oveja que se usan con
calcetines y mocasines, todos vistos en hombres con la cabeza rapada. Lo más
revelador, un logotipo blanco de aertex cortado como un mini vestido de cóctel
que sobresalía del torso gracias al borde interior en tubo, nuevamente llevado
por un chico.
“Fiestas que nunca sucedieron,
fiestas que sucederán. Preciosos momentos de felicidad chocan en una fantasía
frívola de diversión desenfrenada. La colección otoño-invierno 2022 celebra
vestirse como un acto exuberante que cruza las barreras del género y el gusto”,
se lee en
el críptico comentario del diseñador norirlandés que acompañó la presentación
digital.
Debido a las cambiantes normas
sanitarias, Anderson se vio obligado a cancelar un desfile planificado en Milan
Moda Uomo de este fin de semana, privando a la temporada de su evento de
pasarela más esperado. Una ausencia lamentable, ya que se trataba de otra
poderosa colección del conceptualismo cool líder en la moda contemporánea.
Aunque se presentó durante la
temporada de moda masculina, se exhibieron más de una docena de looks femeninos
de Anderson, muchos de los cuales reflejaban las ideas creadas para hombre.
Como un llamativo y levemente torcido abrigo cruzado de borrego color tabaco,
usado por un chico con calcetines y sandalias de playa, y por una chica con
botas beige.
Los modelos desfilaron al
compás de música techno trance, por una escalera y a lo largo de un estrecho
pasillo de metal. Los chicos desfilaron en pantalones cortos de tonos metálicos
(sí, para el invierno). Otro joven modelo, quien llevaba consigo una paloma
disecada, vestía de aertex de lamé dorado y pantalones cortos a juego. La
paloma, al final, resultó ser un pequeño bolso de mano.
Lo mejor de todo, las jóvenes
modelos llevaban hermosos vestidos asimétricos con ojos verdes del tamaño de un
pie, una vez en un vestido blanco, luego en una versión turquesa. Siempre hábil
en la fabricación de bolsos, Anderson también mostró un nuevo bolso plano con
tachuelas para chicos, y un bolso para hombre con forma de osito de peluche.
Sin duda, todos serán un gran éxito.
Algunos se acompañaban de sus
otras grandes ideas: los andróginos Silver Surfers, con chicos y chicas con
monos y calzas de tonos plateados brillantes. Vestidos de aro para hombre y
mujer, todos rígidos sobre el cuerpo; e incluso lo que Anderson bautizó como
Polo Hula Hoop.
K-Way mantiene su fuerte
impulso. La marca ha organizado desfiles intermitentes en los últimos años, y
este ha sido el mejor hasta la fecha.
Además, en línea con la gran
tendencia de arlequín vista en Milán, el elemento clave de la colección fueron
los muchos patrones de rombos. Vistos en chaquetas de plumón de colores vivos y
abrigos de plumas en tonos de amarillo canario, naranja de la casa de Orange y
azul pacífico. Exactamente los mismos colores utilizados en los palcos en los
que se sentó una audiencia de 250 personas dentro del espacio del espectáculo
en el distrito romano de Scalo di Porta Romana.
Este mismo estampado y colores
se utilizaron en las mochilas de fieltro y los ribetes de abrigos de lana
desteñidos. Además de su logotipo deportivo, la marca agregó inteligentemente
un gran borde naranja y amarillo a todas sus cremalleras, en un uso genial de
un significante visual. Moda deportiva elegante y semiótica en su mejor y más
simple forma.
Todos los invitados recibieron
impermeables doblados, con correas de nylon en el mismo naranja y amarillo, en
una colocación de productos a la italiana para editores, compradores e
influencers.
Todas las chaquetas de plumón
iban combinadas con tejidos de colores guijarros utilizados en camisetas sin
mangas ajustadas, leggings ceñidos, gorros gruesos y pantalones con cordón. El
look resultó en un après-ski muy funk, combinado con el estilo descomplicado de
los festivales de invierno. En pocas palabras, K-Way ha logrado hacerse con un
nicho inteligente en la moda italiana y el estilo hipster.
44 LABEL GROUP
Un animado video anunció la
primera exhibición de "pasarela" de 44 Label Group, el más reciente
proyecto respaldado por el empresario de moda italiano Claudio Antonioli.
44 Label Group, creación del
DJ alemán Kobosil, presentó una colección oscura, ideal para salir a la disco
en invierno en Berlín, y en particular a Berghain, el legendario club de Berlín
y una capital del techno europeo, donde Kobosil anima las noches con
frecuencia.
Nacido y criado en el duro
barrio de Neukolln, de cuyo código postal se origina el nombre de la marca,
Kobosil no era un estudiante estrella en la escuela. De ahí se explican todas
las sudaderas con la leyenda Screwed Up y las camisetas con manos esqueléticas
hechas de tornillos.
El elemento clave en esta
segunda colección de 44 Label Group son las chaquetas de plumón para fiesta,
algunas hechas en nylon sensible al calor que cuando lo agarras se torna
brevemente de color blanco. Moda muy dura, en una colección desprovista por
completo de cuero, con chaquetas bomber hechas con materiales más ecológicos.
Según explica Antonioli, uno
de los fundadores de New Guards, quien dejó la exitosa marca con varios cientos
de millones de euros en el bolsillo, 44 Group Label representa un nuevo
proyecto significativo y la estrategia más reciente de su holding Dreamers
Factory. Su próximo paso: un segundo desfile en París en marzo de su sello de
alta costura roquera, Ann Demeulemeester. Claudio es un hombre muy ocupado, al
igual que Kobosil.
Jet Set
Aunque el nombre Jet Set evoca
la década de 1960, la marca parece cada vez más relevante gracias a algunos
ajustes cuidadosos y análisis inteligentes de sus archivos históricos.
Con sede en St. Moritz, un
lugar de la jet set por excelencia, la marca Jet Set tuvo un ocupado fin de
semana en Milán, donde reveló sus últimas creaciones. La ubicación elegida
tuvo, de igual forma, mucha lógica: el Palazzo Parigi, el más grandioso de los
hoteles cinco estrellas recientemente inaugurados en Milán.
“Hemos regresado a nuestras
raíces de forma inteligente y con estilo, pero con un estilo perfecto para
hoy”, explicó Thomas Jaeger, quien fue nombrado director ejecutivo hace apenas
nueve meses.
Jet Set, marca de propiedad
privada, no revela detalles sobre sus ingresos anuales. No obstante, Jaeger
insiste en que la facturación se duplicará este año.
Con múltiples motivos de
estrellas de los años 60, década en que se creó la marca, Jet Set presentó ropa
de esquí elegante, con pantalones de carreras y parkas muy bien logradas.
Luego, reinventó los mismos looks en materiales elásticos ligeros para el
aprés-ski y una velada de cocteles. Aunque la colección otoño/invierno 2022
incluye mucho equipo para las pistas de esquí, también tiene muchas piezas para
visitar las mejores discotecas alpinas.
Después de algunos años
tranquilos y sin mucho crecimiento, Jet Set es una marca en recuperación que
colabora con empresas de comercio electrónico como MyTheresa,
donde sus llamativas parkas metálicas están de moda.
“Creemos que cada vez más
personas irán de vacaciones a los Alpes en el futuro. Debido a preocupaciones
ambientales, los viajes de larga distancia serán menos comunes. La gente querrá
disfrutar de la hermosa naturaleza en las montañas. Jet Set tiene la ropa
adecuada para apreciar los Alpes”, destacó Jaeger, un experimentado ejecutivo
de moda que pasó 15 años en Strellson,
antes de terminar en los Alpes suizos.
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